El Instituto Nacional de Estadísticas (INE) ha dado a conocer las cifras sobre la inflación en Chile correspondientes al mes de noviembre, y los resultados presentan claras señales de desaceleración. Según los datos proporcionados, el Índice de Precios al Consumidor (IPC) tuvo un incremento de apenas 0,2%, situándose dentro de las expectativas de mercado que fluctuaban entre un 0,2% y un 0,3%. Este aumento es notablemente menor al de meses previos, concretamente en octubre, mes en el que el IPC sorprendió a analistas con un incremento mensual de 1%, el más alto desde marzo de 2023. A nivel anualizado, la inflación se posicionó en el 4,2%, mientras que el acumulado en lo que va de año se sitúa en 4,7%.
Al desmenuzar el IPC, se observa que diez de las trece divisiones registraron contribuciones positivas a la variación mensual. En términos específicos, se destacaron alzas significativas en los precios de equipos y mantenimiento del hogar, que subieron un 1,6%, así como en el precio de ordenadores y teléfonos móviles, con incrementos del 3,8% y 1,4%, respectivamente. Además, el precio del transporte aéreo internacional experimentó un aumento notable del 25,3%, lo que refleja el impacto de factores estacionales y variables externas.
Por otro lado, siete divisiones mostraron contribuciones negativas. Particularmente, los precios de las bebidas no alcohólicas y alimentos disminuyeron un 0,3%, con notables descensos en los precios de verduras, legumbres y tubérculos con un -2,4%, refrescos con un -3,1%, y papas con un -3,8%. Cabe destacar también la reducción de los precios de la gasolina, con un descenso del 2,3%, y una caída en el transporte aéreo nacional, que bajó un 14,0%. Estos descensos reflejan no solo las variaciones estacionales normales sino también las políticas internas y factores externos.”
Un aspecto relevante en el análisis de la inflación es el comportamiento del IPC cuando se excluyen los elementos volátiles, que en noviembre subió un 0,3%. Al excluir los precios de alimentos y energía, el IPC mostró un incremento del 0,5%. Curiosamente, el componente energético mostró una disminución del 0,6%, mientras que el componente alimenticio cayó un 0,3% durante el mes. Estos datos son importantes para entender la dinámica inflacionaria sin el impacto de factores que suelen tener comportamientos impredecibles en el corto plazo.
Estos datos revelados por el INE llegan en un momento crucial, justo antes de la última reunión del Banco Central de Chile (BCCh) para 2024, programada para el 17 de diciembre. En esa ocasión, se espera ampliamente que el BCCh reduzca la tasa de referencia en otros 25 puntos básicos, dejándola en 5,0%. Analistas del mercado han indicado que el camino de convergencia de la inflación es más lento de lo esperado inicialmente, y los tipos de interés globales más altos son consistentes con un menor número de recortes de tasas hacia adelante.
En cuanto al futuro económico del país, la perspectiva sigue siendo de cautela. Mientras que una reducción en el ritmo de la inflación puede proporcionar cierto alivio, la situación económica global, con un panorama de incertidumbre en mercados clave, exige seguir de cerca las políticas monetarias y fiscales que adopte Chile. El comportamiento de los componentes de precios tanto internos como externos seguirá siendo un barómetro crucial para ajustar las acciones políticas necesarias a fin de estabilizar la economía y fomentar el crecimiento.
Con la inflación todavía por encima del objetivo establecido por el Banco Central, que comprende un rango de 3% ±1%, el desafío se centra en mantener bajo control el incremento de precios, especialmente en rubros que afectan directamente a los hogares chilenos. Las estadísticas proyectan que en los próximos meses habrá un enfoque particular en el monitoreo del comportamiento de los precios a nivel de consumidor final, y la adopción de políticas que mitiguen los efectos de fluctuaciones bruscas a nivel de consumo energético y alimenticio.
En resumen, la publicación de las cifras de inflación del INE para noviembre ofrece un claro indicio de que el país podría estar entrando en una fase de estancamiento o ralentización del alza de precios. No obstante, sigue habiendo vías complejas que requerirán una atención puntual, sobre todo frente a los factores externos que influyen directamente en algunos segmentos inflacionarios críticos. Mantener un enfoque equilibrado y una política adaptativa será esencial para que la economía chilena transite por esta fase de ajuste inflacionario de manera exitosa.
Escrito por Ezequiel Obregón
Soy un periodista y escritor especializado en noticias diarias de Chile. Me apasiona mantener a la gente informada sobre los eventos más recientes y significativos. Mi trabajo me permite conectar con diversas audiencias y ofrecerles una visión crítica y detallada de la actualidad. Además, disfruto de explorar y narrar las historias que afectan a nuestra sociedad diariamente.
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