Durante cualquier campaña electoral es normal escuchar a los candidatos justificar decisiones pasadas o prometer cambios futuros con frases que suenan a excusa. Estas excusas electorales son una herramienta para desviar críticas y ganar tiempo. Aquí te explicamos de forma práctica cómo reconocerlas y qué hacer al respecto.
La primera categoría son las excusas de falta de recursos. Los políticos suelen decir que no podían cumplir una promesa porque "no había presupuesto" o "las condiciones económicas no lo permitían". La segunda son las excusas de culpa externa, donde apuntan a otros partidos, a la burocracia o a factores internacionales. Por último, están las excusas de futuro: "cuando llegue mi mandato, todo cambiará", sin dar detalles concretos.
Una forma sencilla de ver si estás frente a una excusa es preguntar por datos concretos. Si el candidato menciona un número de presupuesto, solicita la fuente. Si habla de una medida futura, pide un calendario y los pasos específicos. Cuando la respuesta se vuelve vaga o el discurso gira en círculos, lo más probable es que sea una excusa.
Otro truco útil es comparar promesas pasadas con resultados reales. Si en la última elección el candidato prometió "reducir el precio de los transportes" y al día siguiente no muestra avances, esa discrepancia suele esconder una excusa de falta de voluntad o de gestión.
También presta atención a la frecuencia del mismo argumento. Si cada vez que surge una crítica el político repite la frase "es una cuestión de tiempo", probablemente está usando la misma excusa una y otra vez para evitar responder directamente.
En la práctica, no basta con reconocer la excusa; hay que actuar. Puedes convertir la conversación en una petición formal, escribir a la oficina del candidato solicitando un plan detallado, o simplemente compartir la información con tu comunidad para que no se perpetúen esas justificaciones vacías.
Finalmente, recuerda que las excusas electorales no desaparecen por sí solas. La presión ciudadana, los medios de comunicación y la transparencia institucional son los mecanismos que obligan a los políticos a dejar de esconderse tras frases genéricas y a presentar soluciones reales.
En resumen, estar atento a los patrones de discurso, pedir datos concretos y difundir la información son las mejores armas contra las excusas. Así, cada voto se convierte en una herramienta para exigir responsabilidad y evitar que los políticos se escuden en excusas cada vez que les convenga.
Desde el lunes hasta el miércoles 9 de octubre de 2024, aquellos seleccionados como vocales de mesa podrán presentar sus excusas para ser eximidos de esta obligación. Las razones permitidas por la ley para excusarse incluyen estar ausente del país, tener más de 70 años o estar incapacitado física o mentalmente, entre otras. Además, las personas que no cumplan con este deber enfrentarán sanciones económicas.
oct 8 2024